11 tips para salir a cenar con hijos pequeños

Cenar en un restaurante suena hermoso, comes delicioso y no tienes que cocinar ni limpiar. Pero, para los que tienen hijos chiquitos no resulta tan hermoso. Mantener a un niño sentado en su lugar, cuidar que no tire las bebidas o que no destruya la mesa, resulta imposible y eso sin contar que se debe comer y desperdiciar lo menos posible. No es divertido que todos los comensales volteen a ver tu mesa y se queden con cara de “controlen a ese monstruo”.

La solución no es dejar de ir a restaurantes, sino que los hijos se hagan expertos en portarse bien cuando van a lugares públicos. A continuación, algunas mamás nos dan sus mejores consejos para salir a comer en familia y a la vez disfrutar de ello. Algunas ideas son geniales y no tienen que ver con ipads.

1. Juegos de palabras: Mientras llega la comida, los juegos de palabras son una buena idea. Empiezan por la letra “a” y deben buscar un alimento que empiece con esa letra. Se pueden hacer equipos para llevar puntos y hacerlo más interesante y así nadie querrá distraerse ni por un segundo. Veras que antes de que acabes el abecedario la comida ya habrá llegado.

2. Menú de niños: Trata de ir a un lugar que sea amigable para niños pequeños, de esta manera no sentirás que no encajas ahí. Checa si el restaurante que elegiste tiene menú para niños, juegos o periqueras.

3. Entrada: Ordena una entrada para que los niños no se desesperen ni tengan que esperar demasiado a que llegue la comida.

4. Lleva juegos de mesa: Esto depende de la personalidad de los niños, hay algunos que se entretienen con una hoja y colores, pero hay otros que necesitan algo más dinámico. Carga con un juego de mesa portátil para que se entretengan en lo que esperan la comida.

5. Buffet: El buffet puede ser una buena idea cuando vas con niños. Primero, pueden caminar alrededor del lugar y no deben quedarse sentados un largo rato. Segundo: ellos pueden escoger que quieren comer y las cantidades, de esta manera no tienen pretexto de no acabarse la comida.

6. Tiempo de espera: Hay restaurantes que tienen un tiempo de espera demasiado largo y tal vez no valga la pena esperar, pero si realmente quieres hacerlo, la mejor idea es que tú te quedes esperando sola y tu esposo o el adulto que te acompañe, vaya a dar una vuelta con tu hijo. De esta manera, tú tienes tu tiempo a solas y los niños no se estresan. A veces cerca de los restaurantes hay alguna tienda o simplemente caminar por el estacionamiento, cuando esta lista la mesa, les llamas para que vengan y ya no sienten que esperaron tanto.

7. Terraza: Cuando te dejen, pide una mesa afuera. Cenar al aire libre puede ayudar a que los niños se estresen e inquieten menos.

8. Otro juego: Otro juego entretenido es que observen la mesa y todos los objetos que hay encima de ella, les pides que cierren los ojos mientras quitas algún objeto y cuando los abran tienen que adivinar qué es lo que está faltando. Esto es interactivo, pero cuida que no haya nada que puedan tirar o romper sobre la mesa.

9. Trae juguetes: Ten preparada una bolsita con varios juguetes para que se entretengan por unos minutos.

10. Dales de comer primero: Algo que funciona es que los niños cenen en casa y así llegando al restaurante, solo piden el postre, mientras que tú y tu pareja si cenan en el restaurante. Así los niños se portan mejor porque saben que ya va a venir el postre y que si se portan mal, no habrá postre para ellos. También puede que salga la cuenta más barata, sobre todo si tienes hijos melindrosos.

11. Pide el gabinete: Si el restaurante tiene la opción, siéntate en un gabinete. Los niños tienen más espacio y si están cansados pueden acostarse. Además de que es bueno para que se estén quietos, los adultos se sientan en las orillas y los niños adentro.